Mi amigo Dahmer, de Derf Backderf

Durante los años 70, John Backderf y Jeffrey Dahmer crecieron y estudiaron juntos en las escuelas Eastview, en primer lugar, y Revere, años más tarde, en la localidad de Bath (Ohio), llegando a compartir una cierta amistad que se iría diluyendo con el paso de los años, hasta que sus caminos se separaron al finalizar la escuela secundaria en 1978. 13 años más tarde Jeffrey volvió a irrumpir en la vida de John con fuerza.

Era el verano del 91, poco después de ser detenido por la policía, Dahmer confesó que había asesinado a 17 hombres entre detalles de necrofilia, abusos sexuales, canibalismo y descuartizamientos. Para Backderf sería un shock difícil de digerir.

Derf Backderf – pseudónimo con el que firma sus obras -, de formación periodística, estaba en posesión de una perspectiva única y privilegiada de una historia absolutamente excepcional. ‘Tenía entre manos una gran historia que me había caído del cielo’, afirmaba hace poco en una entrevista. Una obsesión personal que comenzó tras el asesinato de Dahmer en la cárcel, a finales de 1994; una historia de la que no se ha podido desprender en los casi 20 años que ha tardado en terminar esta novela gráfica.

Un largo camino

Derf Backderf, tirando de sus recuerdos y sin un objetivo demasiado claro, comenzó a desarrollar algunas historias sueltas basadas en su convivencia con Jeffrey Dahmer en la escuela. El trabajo resultante era lo suficientemente interesante como para plantear una obra de mayor duración y calado. El último empujón que necesitaba Backderf vino a raíz de la publicación en 1997 de una de esas pequeñas historias en el número 18 de la antología Zero zero, editado por Fantagraphics. Las buenas críticas le proporcionaron la seguridad suficiente como para plantearse recopilar todas las historias que había dibujado desde 1994 en una novela gráfica de 100 páginas. Desgraciadamente, no encontró ninguna editorial que se interesara por el proyecto.

En 2002, a pesar de las adversidades, editó con sus propios medios un comic-book de 24 páginas titulado My Friend Dahmer que obtuvo un inesperado premio: una nominación a los premios Eisner. A pesar de todo, Derf Backderf estaba poco satisfecho con el resultado. Su historia con Jeffrey Dahmer podía dar mucho más de sí, y sobre todo, podía llegar a mucha más gente. El  comic-book de 24 páginas de My Friend Dahmer es hoy una pieza bastante codiciada, llegando a alcanzar los 80 dólares en Ebay.

My Friend Dahmer (2002)

My Friend Dahmer (2002), el comic-book

No fue hasta Marzo de 2012 cuando Derf Backderf pudo poner fin a 20 años de bloqueo – más coyuntural que creativo – y de obsesión. Gracias al apoyo de la editorial ABRAMS, su historia de juventud con el carnicero de Milwaukee se terminaría plasmando en una nóvela gráfica de 224 páginas, como resultado de sus recuerdos, de multitud de entrevistas (sobre todo a ex-compañeros  de instituto y profesores) y de una minuciosa revisión documental – desde materiales desclasificados hasta reportajes periodísticos -. Finalmente, Derf Backderf había conseguido publicar una obra a la altura de su propia exigencia.

Mi amigo Dahmer

Derf Backderf nos sumerge en sus años de estudiante en Eastview (Junior High) y Revere (High School) para mostrarnos un prisma cercano y verosímil de la adolescencia de Jeffrey Dahmer que, recordemos, terminaría convirtiéndose en uno de los asesinos en serie más grotescos, inquietantes y tristemente famosos de la historia reciente de EEUU.

El autor describe al joven Dahmer como un chico algo retraído y diferente; un muchacho cuya singularidad le reservaba una difícil travesía de soledad en los complicados años de la adolescencia. Aislamiento que también se reproducía en su propia casa, debido principalmente al difícil matrimonio de sus padres, que ignoraron sistemáticamente a Jeffrey en unos años fundamentales en la formación de su personalidad.

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A pesar del halo trágico de la figura de Jeffrey Dahmer, Backderf deja claro que no fue un chaval maltratado por sus padres, ni siquiera fue el punto de mira de todos los matones de la escuela – sólo en alguna ocasión esporádica – y tampoco mostraba evidencias de un trauma que podría haber marcado el camino hacia sus crímenes. Sencillamente, Jeffrey Dahmer fue un chaval enfermo con multitud de retorcidas obsesiones que comenzaron a germinar durante la pubertad, y que se afianzaron gracias a la soledad que le fue impuesta durante su adolescencia. Estamos precisamente ante uno de los hallazgos de este gran cómic.

Jeffrey Dahmer se veía relegado al ostracismo, y en la soledad, comenzó a tomar contacto con unos retorcidos instintos que poco a poco despertaban de su letargo. El aislamiento y la introspección aceleraron el proceso de tal modo que incluso Dahmer se asustó, y en una desesperada huida de sí mismo, sucumbió al alcoholismo. La trágica respuesta de su entorno fue la total y absoluta ignorancia, y si alguien detectó el problema, no tuvo reparos en mirar hacia otro lado.

Leyendo varias entrevistas a Derf Backderf, podemos afirmar sin temor a equivocarnos que Mi amigo Dahmer debe su existencia a una oportunidad que debía ser aprovechada, pero es inevitable no dejar de intuir cierto sentimiento de culpa entre las motivaciones de Derf Backderf, pues formó parte de ese entorno que, por omisión, contribuyó a la solitaria caída al abismo de Jeffrey Dahmer. Probablemente Dahmer estaba condenado a convertirse en un asesino en potencia, pero al menos se podría haber evitado el daño irreparable que infligió con sus crímenes.

Derf Backderf es un dibujante algo limitado, pero su estilo ‘feista’ – exagerado conscientemente para esta obra -, que pone acento en los aspectos más grotescos e inquietantes de Mi amigo Dahmer, resulta todo un acierto. En algún momento cae en histrionismos algo innecesarios, forzando en demasía el tono sombrío de la figura de Dahmer, pero en términos generales, estamos ante un gran cómic cuyas aristas están pulidas con mimo; algo lógico si pensamos que ha estado rondando la cabeza de su autor durante casi dos décadas.

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Composición y ejecución de una página de ‘Mi amigo Dahmer’.

Mi amigo Dahmer, además de un documentado fresco sobre la adolescencia de Jeffrey Dahmer,  es un lúcido tratado sobre los peajes de la singularidad durante la adolescencia y la ausencia de puentes de comunicación con el mundo adulto. Si bien hay que contextualizar la época y la idiosincrasia del lugar de los hechos, está por ver si hemos mejorado en estos aspectos con el paso de los años.

A principios de 2012, aprovechando la publicación del cómic, Derf Backderf creó un blog sobre Mi amigo Dahmer repleto de información y curiosidades, que, de alguna manera, completa la enorme experiencia que supone acercarse a este perturbador e imprescindible cómic.

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